- Esas son cosas nuestras
- Desde luego, y no le importan a nadie...
La ví ayer. No me gustó tanto como las tres pasadas de Almodóvar. Quizá porque aunque es un drama de grandes dimensiones todo se presenta mucho más cotidiano, menos exagerado y fantástico. Podría decir que dentro del mágico y desgarrador universo Almodóvar, Volver es más realista y menos cruda. Tiene un enfoque postivo: el amor y la lucha por encima del dolor y la tragedia.
Y vuelve, vuelve al mundo femenino, vuelve a las referencias al cine clásico europeo, vuelven Penélope radiante (esta vez guapa) y Carmen Maura divertida. Da para muchos análisis, pero me quedo con el de la privacidad: la ropa sucia se lava en casa y las familias latinas. Los personajes son entrañables como siempre (el pueblo incluido), los colores lo dicen casi todo y la música una vez más me sorprende.
Seguramente no me impactó tanto como las otras por razones personales, las mismas que hicieron que llorara con la canción: Volver. Me sigue impresionando como este señor toma mis canciones favoritas y las pone en sus películas, como si me conociera. Piensa en mí, Cucurrucucú Paloma, Quizá, quizá, Volver... Sé que no son sólo mis favoritas y que eso dice mucho de mi... quizá debí cumplir 50 años, no 21.
- Desde luego, y no le importan a nadie...
La ví ayer. No me gustó tanto como las tres pasadas de Almodóvar. Quizá porque aunque es un drama de grandes dimensiones todo se presenta mucho más cotidiano, menos exagerado y fantástico. Podría decir que dentro del mágico y desgarrador universo Almodóvar, Volver es más realista y menos cruda. Tiene un enfoque postivo: el amor y la lucha por encima del dolor y la tragedia.
Y vuelve, vuelve al mundo femenino, vuelve a las referencias al cine clásico europeo, vuelven Penélope radiante (esta vez guapa) y Carmen Maura divertida. Da para muchos análisis, pero me quedo con el de la privacidad: la ropa sucia se lava en casa y las familias latinas. Los personajes son entrañables como siempre (el pueblo incluido), los colores lo dicen casi todo y la música una vez más me sorprende.
Seguramente no me impactó tanto como las otras por razones personales, las mismas que hicieron que llorara con la canción: Volver. Me sigue impresionando como este señor toma mis canciones favoritas y las pone en sus películas, como si me conociera. Piensa en mí, Cucurrucucú Paloma, Quizá, quizá, Volver... Sé que no son sólo mis favoritas y que eso dice mucho de mi... quizá debí cumplir 50 años, no 21.